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El despacho u oficina es un espacio de trabajo el cual debe reflejar nuestra personalidad, estilo y profesionalismo. Además, de que debe de ser cómodo y funcional de forma que este no afecte nuestra productividad y también, nuestro bienestar.
A la hora de decorarlo, hay que tener en cuenta una serie de aspectos que nos ayudarán a crear un ambiente bonito, que sea agradable y a la vez, sea fácil trabajar en el mismo. Aquí te contaremos qué es lo que debes de tener en cuenta sobre cómo decorar un despacho.
El color de las paredes influye mucho en el estado de ánimo y la productividad de las personas. Los tonos claros y neutros transmiten calma, serenidad y amplitud, mientras que los colores vibrantes y cálidos aportan energía, creatividad y dinamismo de acuerdo con estudios.
Puedes optar por un solo color o combinar varios, siempre que haya armonía y equilibrio. De igual forma, debes de tener en cuenta la iluminación. Observa como entra la luz por la habitación y cómo se refleja en los colores para garantizar que los mismos se aprecien adecuadamente y no generen deslumbramientos u obscurezcan la habitación.
La luz natural es esencial para trabajar bien y evitar la fatiga visual. Si tienes una ventana cerca, coloca tu escritorio frente a ella o en un ángulo que te permita recibir la mayor cantidad de luz posible. Y es que comparada con la luz artificial, la luz natural genera menos desgaste a la vista permitiendo a las personas trabajar mejor.
Es importante evitar los reflejos en la pantalla del ordenador, para ello recomendamos usar cortinas o persianas para regular la intensidad. Si no tienes suficiente luz natural, recurre a la iluminación artificial con lámparas de mesa, de pie o de techo que den una luz cálida y difusa, ya que la luz cálida es la que más se asemeja a la natural.
El mobiliario debe ser cómodo, práctico y acorde con el espacio disponible. El escritorio debe tener el tamaño suficiente para colocar el ordenador, los documentos y los accesorios que necesites. Pero a la vez, debe dejarte suficiente espacio como para moverte libremente por todo el despacho.
La silla debe ser ergonómica, con respaldo, altura y apoyabrazos regulables para evitar molestias en la espalda por pasar mucho tiempo sentado. También puedes incorporar una estantería, un archivador o un armario para guardar tus cosas y mantener el orden. Recuerda que las personas trabajan mejor en sitios organizados.
El despacho debe reflejar tu personalidad y tus gustos, así que no dudes en añadir elementos decorativos que lo hagan más acogedor y único. Además, de que los espacios decorados hacen sentir a los despachos como familiares, cercanos, facilitando que las personas trabajen de forma eficiente.
Puedes colgar cuadros, fotos, diplomas o posters en las paredes, poner plantas, velas, cojines o alfombras en el suelo o sobre los muebles, o usar accesorios como lapiceros, calendarios o agendas. Todo lo que decore ayudará a darle un toque personal a tu despacho.
De acuerdo con estudios, para trabajar mejor y evitar el estrés, es importante que el despacho esté bien organizado y ordenado. Los espacios desorganizados hacen que las personas se sientan desanimadas, sufran de estrés, ansiedad, entre otros problemas.
Usa cajas, cestas, bandejas o archiveros para clasificar tus documentos y objetos de modo que no afecten tu trabajo. Organiza y guarda todo aquello que sea importante y todo lo que necesitas, tíralo. Al tener todo organizado, será mucho más fácil encontrar lo que necesitas y hacer más eficiente tu trabajo.
El clima del despacho también influye en el rendimiento y el bienestar. Durante el invierno o en espacios fríos, por ejemplo, las enfermedades suelen aumentar lo que afecta al desempeño en el trabajo. Procura que la temperatura sea agradable, ni muy fría ni muy caliente. Para ello puedes usar un ventilador o calefacción, por ejemplo.
Renovar el aire de tu despacho también es importante para cuidar el ambiente y hacerlo más agradable. Para ello no olvides ventilar los espacios para renovar el aire que allí se respira. También puedes usar ambientadores naturales como aceites esenciales o inciensos para crear una atmósfera más agradable.
El ruido exterior puede ser muy molesto cuando trabajas en casa. Para evitarlo, puedes usar ventanas con doble cristal, cortinas gruesas o alfombras que amortigüen el sonido del exterior ¡Esto es muy útil cuando estás en juntas o reuniones!
También puedes poner música relajante o de fondo que te ayude a concentrarte y a relajarte. Evita los sonidos demasiado fuertes o estridentes que puedan alterar tu estado de ánimo. Si eres fan de la música, puedes reproducirla en el despacho lo cual ayudará, según expertos, a concentrarte en tus actividades y mejorar tu productividad.
Para trabajar mejor en casa o en tu despacho es importante que establezcas un horario de trabajo y lo respetes. Así podrás organizar mejor tus tareas, cumplir con tus objetivos y separar tu vida laboral de tu vida personal.
Intenta empezar y terminar a la misma hora todos los días, hacer pausas cada cierto tiempo y no trabajar más horas de las necesarias. De esta forma, no crearás una relación tóxica con tu despacho o no lo verás como un lugar negativo, al contrario, lo verás como un espacio agradable.
Por último, para decorar tu despacho debes de disfrutarlo, debes de sentirlo como tuyo y disfrutar del trabajo que realizas. Agradece tener un espacio propio donde puedes desarrollar tu actividad profesional con libertad y comodidad.
También te recomendamos dejar libre tu mente, tu creatividad y tu imaginación pues esto te hará sentirte emocionado por decorar tu despacho. Al ver el resultado de todo tu esfuerzo te sentirás más feliz y conectarás mejor con tu espacio.